Como persona ante todo y como Educadora Social también, el informe de Amnistía Internacional sobre centros de protección terapéuticos para menores me ha removido las entrañas!
No es posible, bueno, no debería ser posible que cosas así ocurriesen, hemos de denunciar todas estas barbaridades y exigir que cambien. No podemos ignorar la realidad simplemente por creernos ajena a ella.
Deja una respuesta